Propagación del COVID – 19; enfoque territorial en la comprensión y
gestión de la crisis
Por
Gonzalo Gajardo Vistoso*
“es lamentable que SalmonChile, sus
asociados y la industria de la mitilicultura tengan de rodillas a Chiloé. En
estos días complejos anteponen sus actividades económicas por sobre la salud de
nuestra gente”
Andrés Ojeda,
presidente JJ.VV. de Chacao[1]
Chile
exhibe la cifra más alta de contagio de América Latina, más de mil personas de
diversa condición. Todo indica que la situación empeorará en las semanas
venideras.
El
Gobierno del Presidente Piñera, ha declarado el estado de emergencia y
catástrofe. Aquello lo faculta para ejercer medidas radicales de control social
en el territorio. No obstante, ha optado por la gradualidad.
Diversos
estamentos de la ciudadanía exigen derechamente restricciones al desplazamiento
entre ciudades y en su interior. El Gobierno alega que; medidas de choque sólo
provocarían efectos colaterales – económicos y sociales – que agudizarían aún más
la crisis sanitaria.
Ambas
racionalidades – radical y progresiva – parecen del todo atendibles dada la
contingencia. No obstante los alcances sociales y territoriales que va
adquiriendo la propagación del contagio, exigen un esfuerzo mayor de disipación
de dudas e incertidumbres.
La
opinión pública rechaza, con toda justicia, lo que considera la primacía de la racionalidad económica por
sobre la seguridad y el bienestar humano.
Urge atender esta “subjetividad”, si no se quiere mutar la crisis
sanitaria en crisis de gobernabilidad.
Al
calor de la incertidumbre y el malestar generalizado, la desigualdad geográfica[2]
comienza a ser tema de debate en el mundo local, atizado por la dinámica de
propagación que adquiere el COVID – 19. Sobran ejemplos de desgobierno y auto
tutela.
La
relación entre; la propagación del virus y el contexto territorial en que
ocurre, es un campo de certidumbre que urge construir; estimar cuan incidente es
la trama territorial en ello.
Urge
comprender y gestionar la crisis también desde los territorios más allá de la
gubernamentalidad. El enfoque territorial
no sólo se corresponde con el ámbito de la planificación del desarrollo regional
y local, sino también con la gestión del riesgo de desastres y amenazas socio
naturales[3].
“aplanar
la curva” de contagio implica también; identificar y reducir localmente la amenaza
a las estrategias y sistemas de vida de las comunidades y la promoción de prácticas
socio espaciales resilientes.
al
momento, y en perspectiva territorial, la autoridad sólo ha dado garantías para el
funcionamiento de extensos clústeres logísticos y la obtención de renta urbana.
Los hechos que están empezando a ocurrir en regiones, indicarían que aquello no es suficiente.
Los
casos positivos y la propagación del contagio en la Región Metropolitana, se
explican por la proporción socio demográfica que esta posee y el peso que esta adquiere
en la interacción espacial a nivel nacional.
No
obstante, hay al menos cinco regiones geográficamente disímiles entre sí, y muy
desiguales con respecto a la metropolitana,
que vienen despuntando no solo en la cantidad de casos positivos, sino
también en la velocidad de propagación el virus; Ñuble,
Biobío, Araucanía, Los Lagos, Magallanes.
Figura
1; total de casos positivos por regiones. Fuente; elaboración propia con
información de reporte diario, 24 de marzo 2020 MINSAL.
Preocupa
la altísima tasa de ataque[4]
del COVID – 19 en estas regiones de la zona centro sur del país. La velocidad
de propagación del virus en estas iguala o superara el promedio nacional
cifrado en 2.7 habitantes contagiados (Por cada 100.000.-)
Las
regiones de Ñuble al sur exhiben tasas que, en el corto plazo, podrían incluso
acercarse al valor registrado en la Región Metropolitana al día 24 del mes de
marzo. La tasa de ataque registrada en la región de Ñuble sorprende. 14,6
habitantes contagiados por cada 100.000.-. Más que doblando a la Región
Metropolitana.
Figura
2; tasa de ataque de COVID – 19 por regiones. 1 X 100.000.- habitantes. Fuente; elaboración propia con
datos aportados por Aníbal Vivaceta.
¿Cómo
ocurre y que implicancias tiene este fenómeno en lo local?
¿Qué
condiciones espaciales y territoriales son precursoras de estas dinámicas locales
de propagación?
¿Es
posible sostener algún modelo de análisis espacial que permita observar, esta
dinámica y anticipar niveles de riesgo a nivel local?
¿Dadas
la naturaleza de esta catástrofe, y en términos estrictamente médicos,
deberíamos sólo enfocarnos en la contención del contagio, sin problematizar
mayormente en el contexto en que ocurre?
¿Pudieran
ser precursores territoriales de gran propagación, el rezago territorial y la inaccesibilidad a las oportunidades humanas (Banco Mundial)[5].?
Resulta
indispensable, analizar los procesos de desarrollo territorial sostenidos hasta
ahora en nuestras regiones. Que tan pertinente son estos a la hora de
garantizar resiliencia territorial, seguridad y bienestar humano.
Urge
abandonar el gen centralista que domina la comprensión y gestión de la crisis
no solo sanitaria sino también social y política. Urge sostener actuaciones
públicas (como también privadas) con enfoque territorial, en pro de abrir el
espectro a la heterogeneidad Geográfica de nuestro país.
* Lic. en Historia, Postítulo en planificación, ordenamiento y gestión
del territorio PUCV, Mg. Gestión de proyectos urbano regionales UVM.
[1] https://www.radiodelmar.cl/2020/03/rebelion-en-chiloe-contra-irresponsabilidad-sanitaria-estatal-y-acuicola/
[2] La desigualdad Geográfica es un concepto de
tradición Marxiana (Harvey) que, en lo principal, dice relación con los efectos
de diferenciación Geográfica en el proceso de desarrollo territorial en pro del
régimen de naturaleza de capitalista. Es; un desequilibrio funcional
estructural en el espacio pro acumulación en un polo dominante. El concepto,
por lo pronto, se ha popularizado a niveles de significación en diversos
ámbitos de análisis respecto de la inequidad y descohesión territorial. En; ver; Ramírez,
E., Tartakowsky, A. y Modrego, F. 2009. “La importancia de la desigualdad
geográfica en Chile”. Documento de Trabajo N° 30. Programa Dinámicas
Territoriales Rurales. Rimisp, Santiago, Chile.
[3] La
gestión del riesgo a nivel local ha
transitado desde la atención coyuntural de desastres hacia un enfoque integral
de la gestión permanente de la vulnerabilidad abordando las dimensiones;
ecológica, ambiental, socio económica y subjetiva de población amenazada. Para
un examen más acabado de este enfoque en el contexto nacional, ver; Arteaga C.
y Tapia R. (2013), Vulnerabilidad y
desastres socio naturales. Experiencias recientes en Chile. Ed.,
Universitaria.
[4] Tasa de ataque, es un indicador
construido por el médico porteño Aníbal Vivaceta, ex SEREMI de Salud que estima
la velocidad del contagio. Vivaceta, ha realizado una importante labor de
análisis de datos estadísticos y
procesamiento de información obtenidos del MINSAL.
[5]
acceso de los grupos humanos a los bienes públicos y privados distribuidos en
distintos centros en el territorio, mediante la utilización de infraestructura
y redes urbanas. cobertura de bienes y servicios públicos y
privados que permiten igualar oportunidades con independencia del esfuerzo
individual.